EN BARCELONA TENEMOS UNA CORAZONADA
Así, pero con Madrid en vez de Barcelona, titula el director de As su articulo de hoy, claro que mis tiros no van por donde los suyos, el se refiere a las Olimpiadas del 2016 y yo me refiero a transcurso de esta liga.
Hoy en la prensa madrileña no se hace referencia al robo y la permisividad que tuvo el arbitro del partido Málaga / Barcelona, porque una cosa es jugar contundentemente, hacer un marcaje férreo y otra cosa es agredir descaradamente y el arbitro permitirlo con toda la cara dura del mundo, y esto es lo que ocurrió en la Rosaleda, donde a Messi lo pisotearon dos veces, a Pique le dieron un señor puñetazo y algunos jugadores se fueron tocados a causa del juego violento de los malaguistas, claro que si en vez de un arbitrario hubiese
habido un arbitro esto no habría ocurrido pues a la primera de cambio tarjeta o expulsión y santas pascuas pero si tu entras violentamente en la jugada, pisoteas a un contrario y le das un puñetazo a otro como hizo Welintong y por el contrario el arbitro no pita nada, pero además llama la atención a Messi y saca tarjeta al agredido Pique, esto te hace impotente que es lo que ahora sienten los jugadores blaugranas y es de lo que se quejan. Pero además da la casualidad que en el partido del Bernabeu en la primera entrada que le hacen a Cristiano donde apenas si le tocan si le sacan tarjeta al defensor, te das cuenta que no se mide con el mismo rasero.
Volviendo al titular por ahí van los tiros, tengo una corazonada, creo que el pagafantas tiene mucha mano y no me extrañaría sea tan larga que llegue a los árbitros de hecho ya Mejia Dávila ejerce de cicerone arbitral y esto crea un precedente, no me extrañaría que los demás hiciesen lo mismo y a ver quien da mas. Lo curioso del caso es que el inventor del villarato esta callado como un zorro, hoy no habla de árbitros ni de favoritismo hoy habla de olimpiadas, pues yo también tengo una corazonada y no me extrañaría que se cargaran a Messi a los hechos me remito, violencia, agresión, juego duro y no pasa nada, eso si al guapito lusitano el de las mojigangas con la boca, a ese ni tocarlo, ya veremos lo que pasa.
RAFAEL FONTALBA