DECISION EQUIVOCADA
Hoy nos levantamos con la noticia, Cruiff nombrado Presidente de Honor en la última reunión de Junta Directiva, pero la división de opiniones no se ha hecho esperar. No vamos a descubrir ahora a Joham, a aquel flaco jugador holandés que nos maravillo con su futbol nos hizo campeón de liga después de bastantes años sin serlo y con el que le metimos 0-5 al Madrid en el Bernabéu. Como entrenador, pues ahí está su palmarés, pero no solo esto, también ha dejado huella, ha dejado un estilo de juego reconocido en el mundo y lo que es mas importante, ha conseguido que tanto jugadores como seguidores tengamos ahora un espíritu ganador, afrontar las competiciones sin complejos y que por fin seamos capaces de creernos que podemos ganarlo todo como así ocurrió la temporada pasada.Dicho lo dicho y a aun reconociendo todos los meritos, Joham Cruiff no es querido por todo el barcelonismo, pero aun así, lo peor de todo es el momento y las posibles consecuencias de esta decisión, a estas alturas no se puede dividir, a estas alturas nos e puede crear un clima de discusión y a estas alturas no se pueden tomar decisiones de tal calibre, primero porque faltan tres meses para que se marche Laporta y segundo porque esto tiene que ser decisión de la Asamblea General de Socios y no de cuatro amigos.
Aquí hay un interés bastardo por parte de Laporta, este pretende arrimar los cruifistas a la candidatura continuista sin importarle las consecuencias, Laporta actúa a la desesperada, ve como Sandro Rosell cada día toma mas fuerza, ve como se le acaba el chollo y ve como no puede hacer presidente a un colega para seguir teniendo cierto poder, pero con esto lo que también demuestra es lo poco que le importa el Barça, va a lo suyo, ya se ha aprovechado bastante para ganar cache político y ahora busca seguir mangoneando en la sobra el Club, esperemos que los socios cuando llegue la hora ponga a cada uno en su sitio incluyendo al sabelotodo que ya en su día pretendió ser presidente y ahora lo va a conseguir pero para siempre, ya veremos como acaba esto, desde luego no a gusto de todos.
RAFAEL FONTALBA